Uno de los mayores atractivos de la edición 2012 de las 24 horas de Le Mans es la participación por primera vez de unos monoplazas híbridos, una interesante novedad que llegará de la mano del actual campeón, Audi, como del aspirante al trono, Toyota.
Pero por sorpresa, la FIA ha decidido limitar las zonas donde los pilotos podrán usar el sistema de recuperación de energía a siete curvas, según los responsables de la Federación, para mantener los costes de desarrollo en unos límites razonables y que limita a 500 kilojulios la energía que podrá ser transmitida entre las dos fases de frenado.
Pero además de evitar grandes gastos por parte de los fabricantes, también limitará hasta cierto punto a un nuevo sistema que amenaza con desbancar en su primer año a los motores diésel, que en la primera prueba, las 6 horas de Spa Francochamps, el Audi R18 híbrido quedaba en segundo lugar solamente detrás del R18 diésel.
La próxima cita serán las míticas 24 horas de Le Mans, donde podremos por fin ver en acción al Toyota LMP1, ausente en Spa por culpa de un accidente durante unas pruebas en el circuito de Paul Richard, y que le ha impedido completar la preparación del coche como estaba previsto, pero que no le ha restado posibilidades de convertirse en el primer híbrido en ganar las 24 horas de Le Mans.
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Fuente | Autosport
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