El gigante automovilístico General Motors anunció recientemente su intención de reestructurarse por completo, pasando a apostar por los coches eléctricos, la conducción autónoma y los servicios de movilidad. Esta reestructuración ha tenido consecuencias directas, pues el fabricante ha anunciado el cierre de varias plantas en Estados Unidos y la discontinuación de modelos como el Chevrolet Cruze o el Volt.
Sin embargo, hasta ahora no se tenían demasiados detalles de esta apuesta por el coche eléctrico más allá de la intención de General Motors de desarrollar una completa gama de vehículos cero emisiones aprovechando toda la experiencia que han conseguido con la producción del Chevrolet Bolt, el que por el momento es casi su único coche 100% eléctrico (en China ofrecen algún modelo más, pero sólo de forma local).
Ahora, se ha sabido que Cadillac, la carismática marca premium del grupo, se orientará a la producción de coches eléctricos para convertirse en un rival directo de Tesla. De acuerdo con lo anunciado por General Motors durante una reunión con inversores el pasado viernes, el primer vehículo basado en la nueva plataforma BEV3 de General Motors será un Cadillac. Por el momento el grupo no ha querido pronunciarse en relación a estas filtraciones.
Actualmente, Cadillac es una de las pocas marcas que ofrece un sistema de conducción autónoma de nivel 3, el Super Cruise. Este asistente sólo funciona en las autopistas mapeadas previamente por General Motors, y es actualmente el único sistema del mercado que permite un funcionamiento «manos libres» a velocidades de autopista (el otro asistente de nivel 3 del mercado, el Traffic Jam Assist de Audi, funciona en atascos).
Si a la tecnología de conducción autónoma de General Motors, cada vez más avanzada gracias a su división Cruise (que este mismo año comenzará a ofrecer un servicio de taxis autónomos de nivel 5 en la ciudad de San Francisco), le unimos su firme apuesta por el coche eléctrico, nos encontramos con un grupo con la capacidad suficiente como para plantar cara a Tesla en su mismo terreno de la mano de Cadillac.
La plataforma BEV3 posiblemente llegue al mercado en el año 2021, si bien por el momento se sabe poco de ella. En caso de que finalmente el modelo de Cadillac llegue en dicho año, coincidiría con la segunda generación del Tesla Model S, lo que pondrá sobre la mesa un interesante duelo entre la cada vez más asentada Tesla y el viejo gigante General Motors, que aparentemente quiere colocar a Cadillac en el centro de su estrategia de electrificación.
Fuente | Reuters
