Esta madrugada Elon Musk ha usado su principal vía de comunicación con la comunidad, Twitter, para responder a un usuario que ha preguntado por cuándo estará disponible el sistema de conducción autónoma de Tesla en Europa. Algo a lo que el máximo responsable del fabricante americano ha respondido.
En un tuit el directivo ha indicado que posiblemente este verano los clientes que hayan pagado los hasta 7.500 euros que cuesta la activación de la «Capacidad de conducción autónoma total» podrán acceder a una serie de funcionalidades hasta ahora limitadas por software.
Queda por ver hasta donde deja la legislación avanzar a un sistema que en Estados Unidos en aquellas unidades donde se ha desbloqueado el máximo nivel pueden lograr un nivel de autonomía realmente elevado.
Tanto que muchos clientes comparten su experiencia en las redes mostrando como el coche es capaz de completar el desplazamiento desde su vivienda hasta su destino sin intervención por su parte. Algo que en Europa posiblemente no pueda hacer todavía por las limitaciones de la normativa de tráfico. Pero también logra algo que si interesará a muchos clientes, y es su capacidad para moverse de forma autónoma por carreteras sin pintar. Una limitación bastante grande para el actual sistema.
Las limitaciones de Autopilot en Europa son las siguientes:
- Enhanced Summon: No puede exceder más de 12 metros en su funcionamiento. La función mejorada de este sistema, que llegará bajo el nombre de Smart Summon, permitirá, en Estados Unidos, un desplazamiento de aproximadamente 50 metros.
- Navegar en Autopilot: Solo puede realizar giros en curvas y salidas de autopista hasta una velocidad de 63 km/h.
- Cambios de carril: Seguramente la característica más afectada en Europa. El sistema ha de realizar la maniobra en un tiempo de entre 3 y 5 segundos para que se lleve a cabo de forma correcta. Esto significa que, si el sistema indica el cambio de carril por medio del intermitente y hay un coche en el carril al que se va a desplazar el coche, la operación debe ser abortada en 5 segundos.
Una vez que se aclare la cuestión legislativa, queda por ver cómo se realiza el despliegue entre la flota europea. En Estados Unidos Tesla ha puesto en marcha un sistema que recoge el estilo de conducir del cliente y le otorga una puntuación. Sólo cuando logra cumplir con los requisitos de la marca, podrán activar el sistema. Algo realmente absurdo ya que realmente los que más necesitan la conducción autónoma son los que peor conducen. Pero es una forma de desplegarlo de forma paulatina sin protestas de los clientes.
También queda por ver si el precio de activar el FSD aumenta, tal como ha sucedido en Estados Unidos y Canadá, donde ha llegado a los 10.000 dólares. Algo que nos indica que en Europa salvo sorpresa, también pasará de los 7.500 euros a los 10.000 euros en breve.
Es de esperar al mismo tiempo que Tesla ponga en marcha un sistema de suscripción del FSD, para que sea activado solo cuando lo necesitemos, por ejemplo en nuestras vacaciones, y de esa forma no tener que enfrentarse al enorme desembolso de su activación completa.