El Tribunal Supremo de Estados Unidos ha recortado el poder de la EPA (Agencia de Protección Medioambiental) para establecer límites a las emisiones de gases de efecto invernadero (por ejemplo, el dióxido de carbono) a nivel estatal, lo que supone un duro golpe a la lucha contra el cambio climático en el país.
De acuerdo con la sentencia, el Congreso no autorizó constitucionalmente a la EPA a dictar normas que limiten de forma importante las emisiones a pesar de la cesión de competencias del Clean Air Act. «Hay pocas razones para pensar que el Congreso asignó esas decisiones a la Agencia». A partir de ahora, la EPA solo retendrá algunas competencias menores.
Tres jueces progresistas han votado en contra de la decisión de un Supremo de mayoría conservadora. La reacción de la Casa Blanca no se ha hecho esperar, pues a través de un comunicado, el presidente Biden ha calificado como «devastador» el fallo del Tribunal, afirmando que pretende hacer retroceder al país en plena emergencia climática.
«Aunque esta decisión amenaza con dañar la capacidad de nuestro país para mantener nuestro aire limpio y combatir el cambio climático, no cejaré en el uso de mis autoridades legales para proteger la salud pública y hacer frente a la crisis climática. Nuestra lucha contra el cambio climático debe seguir adelante y lo hará«.
La comunidad científica rechaza la sentencia del Tribunal Supremo
Por el contrario, el líder republicano en el Senado, Mitch McConnell, ha celebrado la sentencia. «Hoy, el Tribunal Supremo ha devuelto el poder al pueblo. Al ponerse del lado del Estado de Virginia Occidental, el Tribunal ha deshecho las regulaciones ilegales emitidas por la EPA sin ninguna autorización clara del Congreso y ha confirmado que solo los representantes del pueblo en el Congreso —no los burócratas no elegidos y que no rinden cuentas— pueden escribir las leyes de nuestra nación».
Recordemos que, en 2007, el Tribunal Supremo reconoció la autoridad de la EPA para regular las emisiones de dióxido de carbono bajo el antes mencionado Clean Air Act. «El CAA es la ley federal integral que regula las emisiones al aire de fuentes fijas y móviles. Entre otras cosas, esta ley autoriza a la EPA a establecer Normas Nacionales de Calidad del Aire Ambiental (NAAQS) para proteger la salud pública y el bienestar público y para regular las emisiones de contaminantes atmosféricos peligrosos».
Esta decisión supondrá un duro golpe a la política climática de la administración Biden, cuyo objetivo de lograr que Estados Unidos sea un país climáticamente neutro en el año 2050 para así cumplir con el Acuerdo de París ahora parece más lejano. Organizaciones como la Asociación Médica Estadounidense han alertado de los peligros que acarreará este fallo: «La Asociación Médica Estadounidense está profundamente decepcionada con la sentencia del Tribunal Supremo de Estados Unidos que restringe la capacidad de la EPA para regular las emisiones de dióxido de carbono que causan el cambio climático y dañan la salud pública».