En las últimas horas, una noticia está corriendo como la pólvora por San Francisco. Una ciudad pionera en lo tecnológico, que se ha convertido en las primeras en contar con sistemas de taxi totalmente autónomos donde ya no hay un conductor humano a volante. Algo que está animando a algunos usuarios a llevar un paso más allá la intimidad durante sus desplazamientos.
Así lo indica el diario local The San Francisco Standard, que ha entrevistado a varios residentes de San Francisco que afirmaron haber tenido relaciones sexuales en los taxis autónomos en múltiples ocasiones, a pesar de que los vehículos estaban equipados con cámaras interiores para mejorar la seguridad de los desplazamientos y en teoría, vigilar malos usos del sistema.
Pero parece que intimar en el asiento de atrás no parece, de momento, estar entre las acciones prohibidas, como si está hacer otras cosas mucho menos sanas, como fumar o beber alcohol.
El diario ha intentado recabar la opinión de los dos operadores de taxis autónomos más importantes que operan en la ciudad, Cruise, propiedad de General Motors, y Waymo, de Google, pero no han recibido todavía una respuesta sobre este tipo de acciones.
Algo que seguramente tenga una respuesta a no mucho tardar, y que hace tiempo hemos visto también con algunas diferencias en la noticia que nos mostraba a una pareja realizando una escena porno en el asiento del conductor de un Tesla Model X, pero que no ha supuesto cambios en la política de uso del sistema, ya que el conductor estaba en el asiento, y de vez en cuando tocaba el volante.
Finalmente, es de suponer que los operadores tendrán que poner en marcha una serie de medidas que mediante las cámaras, permitan usando algún tipo de IA o supervisión humana, determinar el mal uso del sistema, y parar el vehículo o incluso expulsar de la aplicación a los que realicen actos fuera de la norma.
Pero primero, hay que estipular que no se puede tener sexo en los taxis autónomos, algo que de momento no se ha indicado.
