¿Se convertirá Volvo en la nueva Tesla en Europa? Del fichaje ‘robado’ a Elon Musk al nuevo centro de pruebas en Suecia
Los grandes fabricantes tienen marcado en su calendario los pasos a dar hasta llegar a la electrificación total de sus gamas. Unas muy pronto (como Opel, ya en 2025), otras más tarde… En el caso de Volvo, su intención es la de vender únicamente vehículos 100% eléctricos a partir del 2030, siendo el EX30 una de sus piedras angulares.
De sobra es conocida por todos la capacidad tecnológica de la marca sueca. El carácter pionero está en su ADN y, aunque en el campo de los coches eléctricos esté a rebufo del gigante Tesla y de los fabricantes chinos, está dando varios pasos en una dirección prometedora para convertirse, otra vez, en un referente de la industria.
Ahora, de la mano de Geely, Volvo está viviendo una segunda juventud gracias a la creciente tecnología de electrificación y planea una gran ofensiva de modelos de cara no ya a 2030, sino a 2026. Sin embargo, no todo son nombres de nuevos modelos en el fabricante noreuropeo.
El camino de Volvo hacia la ‘cima’ eléctrica
Uno de sus movimientos clave está en el fichaje de Anders Bell, el ahora director de investigación y desarrollo de Volvo, y que ocupó durante 6 años un cargo similar en Tesla desde el pasado 2016. Bell estuvo en los años de crecimiento exponencial de la marca nortamericana (tanto en California como en Berlín), por lo que puede aportar una visión muy necesaria en la forma de diseñar y desarrollar coches eléctricos.
Por ejemplo, en el empleo del megacasting, el método de fabricación que Tesla usa con el Model Y mediante prensas hidráulicas, y en el que Volvo pretende iniciarse próximamente. Anders Bell jugará un papel fundamental en la ingeniería de los coches Volvo eléctricos que estén por venir.
Curiosamente, Bell mantiene como coche personal un Tesla Model Y, con el que viaja a la fábrica. El sueco, que ya estuvo anteriormente en Volvo y que acumula 25 años de experiencia en ingeniería, hizo una comparativa muy interesante sobre la marca de Elon Musk y el resto de fabricantes: a diferencia de estos últimos, Tesla nunca tuvo un periódico o edición impresa, sino que comenzó siendo digital. El resto de marcas debe hacer una transición al digital que Tesla no ha tenido que hacer, con los problemas que puede conllevar.
Volvo está en ese camino y, para acelerar ese proceso, aparte de fichar a Anders Bell, acaba de estrenar un nuevo centro de pruebas de 22.000 metros cuadrados en Gotemburgo. Allí irá creciendo una infraestructura para el desarrollo del software de última generación de los futuros Volvo eléctricos. La firma sueca no se centrará solo en mejorar los motores, baterías o transmisiones eléctricas: el software será una parte fundamental para conseguir sus objetivos y batir a sus rivales.
Volvo tiene ya instalaciones y centros de pruebas de software en Lund y Shanghai, China, pero esta última en Suecia es la más grande «en términos de tamaño y capacidad»: iniciará con 100 personas y casi 200 bancos de pruebas, pero con el tiempo triplicarán el personal y multiplicará por cinco sus bancos de pruebas.
«Es una instalación de última generación que será el centro de nuestras actividades globales de prueba y validación de software. Los desarrolladores de todas nuestras instalaciones y centros de ingeniería globales pueden ejecutar pruebas de software aquí de forma remota, las 24 horas del día, los 365 días del año. Estoy convencido de que con este nuevo centro de pruebas hemos establecido un nuevo estándar para la industria automovilística», asegura Anders Bell.
El camino de Volvo en la actualidad pasa por el EX30, su nuevo SUV compacto eléctrico que fabrica en China y que pronto lo hará también en Europa. Además, la firma sueca ha firmado un acuerdo con StoreDot para desarrollar baterías que se cargan en apenas 5 minutos.
Fuente | CARUP