El miedo a los coches eléctricos chinos baratos impulsa a los fabricantes tradicionales a lanzar coches asequibles
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Publicado: 11/12/2023 08:30
El auge de los coches eléctricos chinos económicos ha aumentado la presión sobre los fabricantes tradicionales que se han visto forzados a bajar de su pedestal premium y han tenido que empezar a buscarse las castañas para lanzar modelos más económicos. Desde nuevos proveedores de motores, fabricantes de materiales para baterías, hasta fabricantes de chips, todo para reducir costes y desarrollar coches eléctricos asequibles más rápido de lo planeado anteriormente.
Así lo ha confirmado una figura muy relevante en el sector, Andy Palmer, ex número dos de Carlos Ghosn en Nissan y ex director ejecutivo de Aston Martin, que ha indicado que: «Los fabricantes de automóviles ahora sólo están recurriendo a vehículos asequibles, sabiendo que tienen que hacerlo o perderán frente a los fabricantes chinos«.
Palmer, ahora presidente de la startup británica Brill Power, que ha desarrollado hardware y software para los sistemas de gestión de las baterías de los coches eléctricos, dijo que los eléctricos están todavía en una fase de mejora, con mucho margen por delante en muchos aspectos, y por ejemplo, han desarrollado un software que podrá aumentar la autonomía de los coches eléctricos en un 60% y permitir baterías más pequeñas. Un paso clave para poder lanzar coches más económicos.
De fondo hay el temor de una desaceleración de la demanda debido a que los coches eléctricos son bastante más caros en su precio de compra respecto a sus homónimos de combustión, y ahora se enfrentan a problemas como los elevados tipos de interés y la ola inflacionaria.
Esa urgencia se puede ver en todas partes. Renault dijo el mes pasado que planea reducciones de costes del 40% para sus coches eléctricos para alcanzar la paridad de precios con los modelos de combustibles fósiles antes de 2028.
Stellantis está construyendo una fábrica de baterías con CATL en Europa, donde fabricarán las económicas baterías LFP. Un grupo que acaba de presentar el Citroën e-C3, un modelo con 320 km de autonomía, carga rápida, y cuyo precio inicial es de 23.800 euros.
Llegan los coches eléctricos de 25.000 euros
Vincent Pluvinage, director ejecutivo de OneD Battery Sciences, con sede en Palo Alto, California, dijo que en sus recientes visitas a clientes de fabricantes de automóviles europeos, todas las reuniones comenzaban con el mismo estribillo: «Reducir costes es ahora más importante que cualquier otra cosa«.
OneD agrega nanocables de silicio al material del ánodo de la batería de grafito para aumentar la autonomía y reducir el tiempo de carga, ahorrando 281 dólares (casi un 50%) en comparación con el uso solo de grafito para una batería de 100 kWh.
Otra startup, la alemana Veekim, ha desarrollado un motor eléctrico con imanes que utilizan una forma de ferrita o polvo de hierro, en lugar de tierras raras. Un modelo que cinco fabricantes y proveedores están probando para proyectos de coches eléctricos asequibles, y que según el director ejecutivo de Veekim, Peter Siegle, el uso de ferrita y procesos de bajo coste, incluido el cableado de cobre impreso en 3D, puede reducir el precio de un motor medio en un 20%.
Señales que nos indican que los fabricantes occidentales han visto el enorme potencial de los grupos chinos, que incluso con las dificultades y costes de enviar sus coches desde China, están comenzando a tener un cierto impacto en cuanto a precios y ventas.
Unos grupos del gigante asiático que están comenzando a desplegar sus redes de ventas, y también a buscar emplazamientos para sus futuras fábricas en Europa, lo que les permitirá reducir los tiempos de entrega, y posiblemente también los costes de producción y los financieros.
Una competencia que, como vemos, ha hecho reaccionar a unos fabricantes europeos que han acelerado sus programas para lanzar coches eléctricos de precio más razonable, y que miran con el rabillo del ojo el otro meteorito que les amenaza, como es el nuevo modelo de Tesla, que debería llegar en 2025 con un precio de unos 25.000 euros, y con toda la tecnología y visión del fabricante norteamericano.