La imagen de Elon Musk está afectando a X, y también a Tesla que pierde grandes clientes
3 min. lectura
Publicado: 07/08/2024 14:44
Esta semana ha saltado la noticia de que Elon Musk demandará a un grupo de anunciantes después de que estos retirasen sus campañas en la red social X. Un movimiento que tiene su origen en el rechazo que muchas empresas están expresando por el posicionamiento político de Musk en favor de Donald Trump, y la deriva que está tomando la antigua Twitter.
Linda Yaccarino, CEO de X, ha publicado una carta este martes, anunciando una demanda contra la Global Alliance for Responsible Media (GARM), la World Federation of Advertisers (WFA) y a los integrantes de la primera, marcas como CVS Health, Mars, Ørsted o Unilever, por la retirada de sus campañas.
Ahora, Tesla también se está viendo afectada por la deriva política de Musk, y después de perder a clientes de flotas, cruciales para cualquier marca, como el gigante del software SAP, las empresas de alquiler de coches, como Sixt o Hertz, ahora ha visto como la red de droguerías alemana Rossmann, la segunda cadena de droguerías más grande de Alemania, con 4.700 droguerías y 62.000 empleados por toda Europa, también ha indicado que no comprará más coches de Tesla.
Según el comunicado escrito por Raoul Rossmann, hijo del fundador de la empresa: «Elon Musk no oculta su apoyo a Donald Trump. Trump ha descrito repetidamente que el cambio climático es un engaño. Esta actitud contrasta profundamente con la misión de Tesla de contribuir a la protección del medio ambiente mediante la producción de coches eléctricos«.
Como recordamos, Musk, mostró públicamente su apoyo a Trump en X minutos después de que el expresidente sobreviviera a un intento de asesinato. Musk confirmó más tarde que estaba donando dinero a un comité de acción política que apoya al candidato republicano.
El movimiento no es preocupante para Tesla, ya que la flota de la compañía es de apenas 800 unidades, y de ellas solamente 14 son Tesla. Pero si puede ser una señal de preocupación más, una de varias, que dibujan un escenario donde la figura de Musk parece que se ha transformado de un valor de marca y un importante atractivo de clientes, en una figura polarizante que causa rechazo, tal como indican los estudios.
Queda ahora por ver si la tendencia continúa creciendo, y más empresas deciden prescindir de los productos de Tesla, muy afectados también por los constantes cambios de precio y la dificultad para calcular un valor residual, que frena las compras de canales como el renting.
Una deriva que, como vemos, también está comenzando a afectar de forma importante a otra de las empresas de Musk, X, que ha perdido un 72% de valor en bolsa desde la compra del millonario, y que parece caer sin frenos ante la aceleración de la pérdida de anunciantes.