Los trabajadores de la fábrica de coches eléctricos de Ford en Colonia se declaran en huelga

La planta de Ford en Colonia, Alemania, epicentro de la estrategia de electrificación europea del gigante americano, se enfrenta a una huelga inminente por la anunciada supresión del 14% de su plantilla en el continente.

Esta decisión, justificada por la compañía debido a las pérdidas generadas por la baja demanda de vehículos eléctricos y la supuesta falta de apoyo gubernamental a la transición, ha encendido las alarmas de los sindicatos, que denuncian un “retroceso social”. La producción de modelos clave como el Explorer y el Capri se verá afectada, intensificando la presión sobre la dirección en un momento crucial para la estrategia eléctrica de Ford.

Este escenario de tensión en Alemania plantea una interesante perspectiva para la planta de Ford en Almussafes, Valencia. En los últimos años, la factoría española ha vivido momentos de incertidumbre, con ajustes de plantilla y varios ERTE por la reestructuración de la producción. Sin embargo, la posición estratégica de España en términos de costes energéticos, un 60% más económico que Francia o Alemania según los últimos estudios, podría convertirse en un factor clave para asegurar el futuro de la planta valenciana.

Esta ventaja competitiva en un sector tan intensivo en energía como la fabricación de coches eléctricos podría ser un argumento de peso para que Ford considere reforzar la producción de sus modelos eléctricos en Almussafes.

Pero, ¿qué modelo fabricará Ford en Valencia? Si tenemos en cuenta que el Puma se prode en Craiova (Rumanía) y además que este usa la plataforma existente B2E, nos queda la posibilidad de que la planta española se encargue del modelo de bajo coste.

Esta plataforma, conocida internamente como Global Electric 2 (GE2) llamada a reemplazar a la GE1 del actual Mustang Mach-E, podrá dar como resultado más de una propuesta debido a su flexibilidad en un modelo que podría ser un SUV compacto, que se colocará ligeramente por debajo del Explorer, aunque también podrá dar como resultado un compacto del segmento B, para competir contra los Renault 5 o Citroen ë-C3 entre otros.

Bajo coste energético como atractivo para nuevos coches eléctricos

Si la crisis en la planta alemana persiste y los costes de producción siguen siendo un factor determinante, España podría presentarse como una alternativa más atractiva para la fabricación de los futuros modelos eléctricos de Ford en Europa.

La infraestructura ya existe, la mano de obra cualificada también, y el menor coste energético podría traducirse en una mayor rentabilidad para la compañía.

También no menos importante es que, gracias al bajo coste energético, España está atrayendo industria estratégica como la producción y baterías. Y para un fabricante de coches eléctricos, tener el suministro de baterías cerca es muy importante. Y en Valencia, PowerCo, la filiar de Volkswagen, está levantando una de las diversas gigafábricas de baterías que se preparan en nuestro país, y que pueden inclinar la balanza a la hora de decidir donde se fabricarán los coches del futuro.