Ayer FCA (FIAT-Chrysler) y Renault hicieron oficiales sus negociaciones acerca de una posible fusión total de ambas compañías, una noticia que tomó a todo el mundo por sorpresa. La unción de ambos grupos supondría la creación del tercer mayor fabricante automovilístico del mundo por volumen, sólo por detrás de Volkswagen y Toyota, mientras que si además contabilizamos las ventas de Nissan y Mitsubishi (que forman parte de la Alianza Renault-Nissan-Mitsubishi), se configuraría el mayor grupo automovilístico de la historia.
De ambos grupos, el que más necesita un socio en la actualidad es FCA, pues sus gamas están algo anticuadas y necesita un socio estratégico para poder reducir costes y afrontar las ingentes inversiones que supondrá la movilidad eléctrica, un terreno que Renault domina gracias al éxito de modelos como el ZOE, que fue el coche eléctrico más vendido de Europa entre 2015 y 2017.
Actualmente, la Alianza Renault-Nissan-Mitsubishi está desarrollando la plataforma modular CMF-EV para coches eléctricos, que será similar a la MEB de Volkswagen (baterías planas, motores en los ejes, etc). Sin embargo, esta plataforma todavía no está lista, y entretanto FCA necesita lanzar sus propios coches eléctricos para poder hacer frente a las nuevas normativas europeas.
FIAT confirmó durante el pasado Salón del Automóvil de Ginebra de este año que a principios de 2020 presentarían la nueva generación de su exitoso 500, la cual sólo se ofrecería en versión 100% eléctrica (500e) y conviviría con el actual 500 térmico (500 Classic), el cual será sometido a un restyling para aguantar unos años más en el mercado como complemento del nuevo 500e (recordemos que el actual 500 lleva a la venta desde 2007 sin apenas cambios).
Aparentemente, FCA y Renault llevan muchos meses negociando su fusión, por lo que es altamente probable que el nuevo 500e sea un derivado del Renault Twingo, cuya plataforma Edison fue diseñada desde un principio para albergar un sistema de propulsión eléctrico. Actualmente el Twingo se fabrica junto al Smart forfour de Daimler (Mercedes-Benz), el cual este mismo año pasará a producirse sólo en versiones 100% eléctricas (EQ forfour).
El nuevo 500e permitiría a Renault compensar la disminución en la producción del forfour cuando dejen de venderse sus versiones térmicas. Además, a medio plazo Smart dejará de fabricar sus modelos en Francia con Renault, pues ahora la china Geely posee el 50% de la marca germana y quiere producir sus vehículos urbanos en el país asiático. Teniendo en cuenta el éxito del actual 500, la adición del 500e a la línea de producción del Twingo permitiría a Renault mantener la rentabilidad de su modelo más pequeño.
Viendo la paulatina electrificación que sufrirá próximamente el segmento A europeo, lo más probable es que Renault también lance su propio Twingo ZE 100% eléctrico, que lleva congelado desde el año 2014. Este modelo se situaría por encima del Dacia City K-ZE y por debajo del Renault ZOE Néo, y al igual que el FIAT 500e, debería rondar los 20.000 euros antes de ayudas.