En un reciente informe hecho público por Morgan Stanley, los analistas reconocen que Tesla (NASDAQ: TSLA) cuenta con una ventaja casi sideral respecto al resto de la industria automotriz tradicional, según avanza la transformación hacia el coche eléctrico.
El análisis y la apreciación tan contundente es fruto del estudio de la nueva ley de infraestructuras de vehículos eléctricos, que el presidente Biden quiere poner en marcha, con un presupuesto de 174 mil millones de dólares.
De hacerse realidad este plan, según Morgan Stanley, Tesla contaría en la actualidad con una «ventaja desproporcionada» respecto al resto de fabricantes tradicionales que aún se encuentran en plena fase de transición hacia el coche eléctrico.
Por delante del resto
Pero para los analistas de Wall Street, Tesla no sería la única aventajada. Las nuevas startups nacidas alrededor de la movilidad cero emisiones se sumarían al grupo de los aventajados frente al resto de la industria.
Pese a que frente a Toyota, Stellantis o Volkswagen, en volúmenes de producción Tesla es casi una gota en el océano. Su capacidad productiva es 100% de coches eléctricos que suma números que comienzan a ser serios y considerables, respecto a la producción 100% eléctrica del resto.
Ventaja competitiva
En este aspecto se basan los analistas de Morgan Stanley para atribuir una ventaja competitiva en el coche que será el más demandado en breve por los mercados más avanzados.
«Muy probablemente, habrá algunas políticas que pueden incentivar tecnologías que pueden no ser parte de la solución a largo plazo, lo que requiere varias revisiones en el camino. Con todo esto creemos que los inversores en el sector del automóvil se enfrentan a un mayor riesgo si no cuentan con acciones de Tesla en su cartera, respecto aquellos que poseen acciones de Tesla en su cartera«, afirman desde Morgan Stanley.
