Bicicletas eléctricas policiales para multar… a otros ciclistas imprudentes: así es esta surrealista historia

El uso de las bicicletas eléctricas es cada vez mayor, hasta el punto de ser uno de los medios de movilidad más alentados para reducir la huella de carbono en las ciudades. Cada vez hay más adeptos a estas e-Bikes, más marcas involucradas y más modelos en el mercado.

Algunos organismos públicos, como los cuerpos policiales, utilizan ya en algunas ciudades estas bicicletas eléctricas para patrullar y moverse por las calles de una forma ágil y eficiente. Sin embargo, lo que hemos conocido en Estados Unidos llega a un nuevo nivel, produciéndose una situación un tanto particular.

En el condado de Washoe, concretamente en Incline Village (en el estado de Nevada), el departamento de policía acaba de adquirir seis nuevas e-Bikes Recon Power para cumplir con estos fines. Sin embargo, tienen una tarea un tanto particular: controlar a los ciclistas imprudentes de bicicletas eléctricas. Para mayor inri, cabe decir que allí se acaba de aprobar una ordenanza que prohíbe la circulación de las e-Bikes por los carriles bici.

Es decir, que todo aquel que quiera circular con su bicicleta eléctrica por las calles y senderos que rondan el Lago Tahoe deberá circular por la carretera, junto a los vehículos. Y los policías encargados de controlar que esto se cumpla circularán… en bicicleta eléctrica. Eso sí, también tienen la tarea de ‘cazar’ a los conductores de bicicletas ilegales, vehículos que parten de motos de cross eléctricas que se hacen pasar por e-Bikes.

No muy lejos de allí, en California, se han visto escenas de policías subidos a caballo para perseguir y multar a este tipo de ciclistas irregulares. Ahora, la Oficina del Sheriff del condado de Washoe tiene, al menos, un medio más ágil y acorde para estas tareas: «La policía de la ciudad tomará medidas enérgicas contra los ciclistas eléctricos inseguros. Con esta nueva ordenanza, se obliga a que estas bicicletas eléctricas tengan que circular por las carreteras y seguir las mismas normas de circulación que los coches», aseguró el sargento Nicholas Tone al medio SFGATE.

Por su parte, un residente de Incline Village criticó la medida en la página de la ciudad en Facebook y aseguró que «parece contradictorio, con la reducción de los viajes en coche y la contaminación en la cuenca del lago Tahoe. Además de las bicicletas eléctricas, generalmente viajan más rápido que las que no son eléctricas, entonces, ¿por qué no imponer un límite de velocidad igual que el de los automóviles en lugar de una prohibición total?».

Veremos si los vecinos y los gobernantes llegan a algún tipo de acuerdo para poner solución a una medida que se antoja contradictoria teniendo en cuenta la compra que acaban de hacer para sus agentes.

Fuente | Bicycling.com