A finales del pasado año hemos conocido la noticia de la asociación del grupo europeo Stellantis con la china Leapmotor. Un acuerdo estratégico que permite inyectar capital en los asiáticos, y hacerse con un potente socio. Un atajo que además tendrá a Europa como principal objetivo de los nuevos modelos de la que será la 15ª marca del grupo, y que las fuentes internas incluso indican dónde y cuándo comenzará su fabricación.
Según fuentes consultadas por el diario italiano Corriere de la Sera, Stellantis habría elegido la planta de Mirafiori, Turín, para la producción del primer modelo fruto de la asociación con Leapmotor. Una planta de donde sale el FIAT 500, que recientemente ha tenido que parar su producción por la baja demanda del urbano.
Esta instalación arrancaría sus líneas a lo largo del año 2026, y contará con una capacidad máxima de 150.000 unidades al año, en una colaboración que espera vender 500.000 coches al año a finales de la década. Unas cifras que podemos comparar con las 111.000 unidades que ha producido Leapmotor el pasado año entre todos sus modelos, y que nos indican que hay muchas expectativas para esta asociación.
Durante un encuentro con periodistas, el propio director ejecutivo de Stellantis, Carlos Tavares, ha indicado que «Si tenemos la oportunidad de producir los modelos de Leapmotor en Italia, lo haremos. Si tiene sentido desde el punto de vista económico sería una gran oportunidad para el mercado europeo«.
Stellantis y Leapmotor
Como recordamos, con este acuerdo se ha creado una nueva empresa conjunta en Europa denominada Leapmotor International, que tiene su sede en Países Bajos, y de la que Stellantis controla el 51%.
Su objetivo es el desarrollo de coches eléctricos que además de un elevado nivel de tecnología, tengan también precios competitivos. Uno de los principales retos de la producción en Europa.
Una colaboración que permitirá, según los directivos del grupo europeo, poder hacer comparativas en tiempo real entre los desarrollos propios y los de la marca china, para lograr sinergias que aceleren el desarrollo y evolución de sus productos, al mismo tiempo que permiten poner en el mercado vehículos de una forma más ágil, ayudando a reducir los costes de diseño y producción.
Queda por saber si Stellantis tendrá acceso a toda la tecnología de Leapmotor, o como en acuerdos como los firmados por otras marcas occidentales, como Volkswagen y Xpeng, podrán acceder solo a una parte.
También queda por ver cómo encajará una marca como Leapmotor dentro del universo de denominaciones de Stellantis. Un grupo que cuenta con nada menos que 14 marcas, que serán 15 con esta adquisición. Algo que hace complicado el no llegar a pisarse la manguera con otras denominaciones.
