Una de las imágenes polémicas de la Semana Santa: procesión de coches Tesla esperando en los Supercargadores

Ha sido una de las imágenes más virales de esta Semana Santa en España en las redes sociales. Más allá de las procesiones, del mal tiempo, de las carreteras nevadas… muchos usuarios en Internet se hicieron eco de la experiencia vivida por muchos conductores de coches eléctricos Tesla en un tramo muy concreto de la A-31, la carretera que une Alicante con el centro peninsular, cuando querían usar los puntos de recarga disponibles.

Sucedió en las dos estaciones de Tesla con sus Supercargadores en esta vía, al poco de pasar Albacete en dirección a Madrid: La Gineta, donde hay ocho puntos de recarga V2 de hasta 150 kW, y en Atalaya del Cañavete, con otros diez puntos que alcanzan la misma potencia. Allí se han producido largas colas de conductores esperando para recargar las baterías de sus coches, junto coincidiendo con los días de más tráfico en las carreteras españolas.

Usuarios de la antigua Twitter compartieron fotos y vídeos de las colas y de algunos otros problemas, como por ejemplo el no funcionamiento de dos de los postes de La Gineta o que la potencia se veía muy reducida cuando había tantos coches enchufados a un mismo tiempo. Algunos de ellos, relatan, tuvieron que irse a otra estación de recarga a varios kilómetros.

Hay que recordar que los primeros Supercargadores, los de generación V1 y V2, sí que dividen la potencia máxima disponible, como ha sucedido en las estaciones manchegas en los últimos días (ambas son V2). Los últimos en llegar, los V3 y V4, no lo hacen, como el situado poco antes de llegar a Albacete, en Hellín, en la carretera A-30, donde hay ubicados cuatro nuevos puntos de recarga de última generación.

«Espero que estén en vuestros planes un upgrade dentro de poco, porque esto solo puede ir a peor con cada vez más teslas en la carretera»; «Segunda vez en 1 mes que tenemos problemas en Atalaya del Cañavate (Spain). Casi 2h para cargar. 1h y media de espera (+10 coches). Varios cargadores inutilizados. Así no», dicen algunos de los usuarios afectados en X.

Echando un vistazo a los mapas de Electromaps podemos observar como en la misma ubicación de La Gineta había otros cargadores Zunder, con 6 puntos adicionales de hasta 360 kW, los cuales no fueron mencionados en las publicaciones de redes sociales, donde te podrás imaginar, fueron muy comentadas. Antes, en Albacete, se encontraban dos puntos Ionity de hasta 350 kW, además de otros dos de 150 kW en Villar de Chinchilla y otros dos más adicionales de 100 kW. Posteriormente, en La Roda, también habían disponibles otros seis puntos Zunder de hasta 250 kW, así como otro par de hasta 100 kW. En Atalaya, más adelante en la ruta hacia Madrid, había al lado unos puntos de recarga de Iberdrola de 50 kW.

Lo cierto es que estos cuellos de botella generados deberían servir como toque de atención para llevar a cabo la tan necesaria creación de una infraestructura de recarga más numerosa y potente. El último Barómetro de ANFAC sobre la electromovilidad en España mostraba la escasa apuesta por los puntos de recarga rápidos y ultrarrápidos, fundamentales para que el coche eléctrico sea una realidad para poder realizar viajes largos.

De los 11.173 nuevos puntos de recarga instalados en España en 2023, para sumar un total de 29.301: de estos, apenas el 19% tienen una potencia superior a 50 kW, pero es que solo 904 de ellos superan los 150 kW en toda la infraestructura viaria española. Además, el 21% se identificaron como fuera de servicio, bien por estar averiados o porque todavía no se han podido conectar a la red eléctrica.

Opinión

La conclusión puede ser que a pesar de la evidente mejora que ha vivido la red de carga rápida en España, estamos todavía muy lejos de la densidad de nuestros vecinos, Portugal y Francia, y muy lejos de las referencias, como Alemania o el norte de Europa.

Y es que una estación de carga debe cumplir con ciertos requisitos para ser algo más que un punto en un mapa. Debe contar con suficientes puntos, de alta potencia, y ser capaz de ofrecer esa potencia independientemente del número de vehículos que se conecten.

También poner el punto sobre el papel que están jugando los a priori grandes protagonistas del sector, las empresas eléctricas, que no están a la altura de las circunstancias a pesar de su enorme capacidad. Y es que en muchas ocasiones o las estaciones no funcionan, o son puntos inservibles para los viajes, con potencias de 50 kW, o directamente son puntos que no están todavía activos, dejando la responsabilidad a pequeños operadores que están sacando adelante las castañas con mucho esfuerzo.