Si Porsche no fabrica un 911 eléctrico, tú lo puedes hacer con este kit de conversión de la generación 964

Porsche ya está apostando por el vehículo eléctrico, y más que lo hará en los próximos años, a pesar de sus recientes anuncios de que la marca rebajaría sus objetivos de electrificación por el estancamiento que están sufriendo las ventas a nivel global. No obstante, más tarde o más temprano, toda la gama Porsche será 100% eléctrico; o mejor dicho, casi toda, porque hay un modelo en particular que seguirá un ritmo diferente.

Se trata del Porsche 911, al que la marca bávara quiere darle un futuro diferente: con motores de combustión, sí, pero que pueda estar alimentado por otro tipo de combustibles alternativos, como los e-fuels. Pero tranquilo, porque si eres de los que sueña con ver un 911 totalmente eléctrico, no tienes por qué esperar a que Porsche lo anuncie (si lo hace) dentro de unos años.

A día de hoy, conducir y poseer un Porsche 911 eléctrico es posible, gracias al preparador británico Fellten, especialista en realizar conversiones de coches eléctricos. Su última creación tiene como protagonista a la generación 964 del mítico nueveonce, que se comercializó entre 1989 y 1994, uno de los últimos refrigerados por aire. Su recordada mecánica bóxer de gasolina ha sido reemplazada por una 100% eléctrica y, según sus creadores, mantiene intacto el chasis, la misma distribución de pesos y la capacidad de maletero.

La gracia que tiene esta conversión del Porsche 911 de Fellten, que ofrece un kit a medida para el deportivo alemán, es que es totalmente reversible. Es decir, que si decidas gastarte los 78.000 dólares que cuesta el kit en total y terminas cansándote, puedes devolverlo a su estado anterior, ya que dicho kit no requiere ninguna modificación en el vehículo.

El trabajo de Fellten para convertir el 911 964 en eléctrico lleva unas 100 horas de trabajo: en este tiempo se instala un motor eléctrico de origen Tesla, con 450 CV de potencia, que impulsan al renacido nueveonce de 0 a 100 km/h en 4,5 segundos, mejorando así sus prestaciones. Todo va anclado a los soportes originales del motor y la caja de cambios, y la conversión incluye también todo el cableado de alto voltaje.

El pack de baterías alcanza los 62 kWh de capacidad, aunque este se divide en un paquete delantero y en otro trasero de mayor capacidad, en ambos casos con refrigeración por líquido. La autonomía anunciada es de 320 kilómetros WLTP. Con el cargador de a bordo se puede recargar la batería con corriente alterna en 7 horas con una potencia de hasta 6,6 kW, aunque también admite carga rápida de 70 kW a través de un conector CCS2. El sistema cuenta incluso con un sistema de carga bidireccional de 3,3 kW y con freno regenerativo.

Fellten también ha introducido cambios en el interior, dotando al vehículo de una pizca más de tecnología. La instrumentación tiene, eso sí, diales analógicos para mostrar detalles como la velocidad, la autonomía, la potencia… pero con un diseño que nos recuerda a los indicadores de fábrica de Porsche de principios de los años 80. Se ha incorporado un sistema de aire acondicionado, una dirección asistida eléctrica, nuevos frenos, un sistema eléctrico adicional de bajo voltaje y un diferencial de deslizamiento limitado ATB.

Esta preparación del Porsche 911 964 se anuncia por un precio de unos 71.000 euros al cambio, y Fellten ya se ha asegurado de contar con instaladores aprobados por todo el mundo para instalar este kit tan especial para uno de los deportivos más populares del mundo.