BYD ya es la tercera marca de coches más grande del mundo… y pronto será la segunda

El crecimiento de BYD es sin duda uno de los aspectos más destacados de los últimos tres años en la industria del automóvil. El fabricante chino se convirtió así en una de las marcas más vendidas del mundo en 2024 gracias al fuerte crecimiento de la demanda de coches eléctricos e híbridos enchufables en China, y que se está extendiendo por todo el mundo. Algo que está disparando a BYD.

Con más de 4 millones de automóviles vendidos en todo el mundo, BYD se convirtió en el quinto grupo automovilístico más grande del mundo en 2024, solo por detrás de Toyota, Volkswagen, Hyundai-Kia y Stellantis.

Unas cifras que ya le colocan por delante de General Motors o Ford, entre otros. Pero teniendo en cuenta solo la clasificación por marca, no por grupo, las cifras son incluso más llamativas.

Y es que, a pesar de que BYD también está creando su propio Grupo, con denominaciones como BYD, Yangwang, Denza y Fang Cheng Bao, la realidad es que el grueso de las ventas corresponden todavía a la matriz.

Esta ha logrado cerrar el pasado año con 3,8 millones de coches vendidos. Una cifra que le colocan en la tercera posición mundial, solo por detrás de Toyota, con 9 millones, y Volkswagen con 4,8 millones de unidades.

Pero la dinámica de unos y otros es muy diferente. Toyota ha logrado ser líder destacado, pero ha vuelto a marcar un año negativo con un descenso de sus ventas de un 3.7% respecto al año anterior. Volkswagen ha logrado un 1.4% menos ventas que en 2024.

BYD, por su parte, ha visto como sus matriculaciones se disparaban un 41.2% en el cómputo interanual. Una cifra que, de mantenerse este año, le permitirá adelantar sin problemas a Volkswagen, situándose como segundo fabricante mundial de coches.

Algo que se verá favorecido por la fase expansionista de una BYD que prepara la puesta en marcha de nuevas fábricas por todo el mundo, Europa incluida, así como la botadura de nuevos barcos de transporte propios, que multiplicarán su capacidad exportadora.

Una dinámica positiva que choca con la depresión de Toyota y Volkswagen, especialmente esta última, que está en plena fase de reducción de costes y de fuerza laboral, con dolorosos despidos en Alemania y el cierre de diferentes centros de producción.

Ante esto la pregunta no es si BYD superará a Volkswagen, sino cuando sucederá.