El pasado mes de junio Tesla convocaba a todos los medios para mostrar una revolución. Se trataba de un cambio de batería que permitía a un Model S repostar más rápido que un coche con motor de combustión, todo un eslogan que atrajo la mirada del mundo. Incluyendo la nuestra en varios artículos (Post 1, Post 2, Post 3)
En las imágenes publicadas podemos ver que en apenas 1.33 minutos, un Model S recibe una batería totalmente cargada con la que continuar su viaje. Un cambio de batería de Tesla que Elon Musk ha defendido como la forma de sentir que tenemos el mismo nivel de libertad que con un coche de gasolina. Pero a falta de menos de dos meses todavía no hay ninguna instalación disponible, lo que no ha evitado que Tesla comience a rentabilizarlas.
La cuestión es compleja y tiene que ver con la ley de emisiones del gobierno de los Estados Unidos. En estados como California esta ley está especialmente diseñada para que los vendedores de coches eléctricos logren unos importantes ingresos con la venta de créditos. Estos se venden a aquellos fabricantes que no cuenten con este tipo de vehículos en su gama.
En la práctica Nissan y Tesla son los que están logrando hacerse con la mayor parte de estos créditos. También hay que decirlo, son los que más fuerte han apostado por la movilidad eléctrica. El sistema está abierto a cualquier constructor, no sólo Nissan y Tesla. El problema es que estos créditos valen mucho dinero, en torno a los 5.000 dólares por unidad, y un Tesla puede lograr hasta 7 puntos, por los 3 del LEAF.
Esto quiere decir que cada vez que Tesla vende un coche en California, consigue créditos por valor de 35.000 dólares. Evidentemente estos créditos no tendrían tanto valor si no hubiese nadie que los comprase. Pero la falta de motivación de los grandes fabricantes, como Honda, FIAT, Toyota…etc, hacía el coche eléctrico ha provocado justo la situación contraria.
El cambio de batería de Tesla
Hasta aquí hasta cierto punto todo normal. El problema llega cuando vemos que Tesla ya está logrando una importante cantidad de estos créditos, todo gracias a la posibilidad de que sus coches puedan realizar el cambio de batería. Una tecnología que estaría en funcionamiento antes de final de año, pero de la que no hemos sabido nada más desde su presentación.
La cuestión es que la normativa de emisiones establece un mínimo de 483 kilómetros de autonomía, y un máximo de 15 minutos para una recarga completa. A nivel de autonomía el Model S está cerca (logra 427 km bajo el ciclo EPA) pero se queda muy lejos en cuanto a recarga. Para solucionarlo, Elon Musk se sacó de la manga el cambio de baterías. Un sistema que en apenas minuto y medio permite recuperar el 100% de la carga y que le permite acceder a más créditos de emisiones.
Sería algo completamente legítimo y plausible. El problema repetimos es que no hay noticias de la puesta en marcha de ninguna obra que tenga como objetivo levantar una estación de cambio de baterías. Sería algo absurdo, ya que en teoría Tesla sólo necesitaría una única estación para cumplir la normativa.
En cambio lo que si es visible es que casi la mitad de los ingresos por la venta de créditos de emisiones está llegando gracias a esta posibilidad. Un sistema que seguirá produciendo créditos hasta el 2018, cuando sólo se tendrá en cuenta la autonomía, y para lo cual Tesla no necesitará poner en marcha las estaciones de cambio de baterías.
¿Puede el Tesla Model S cambiar su batería?
Como hemos dicho, Tesla sólo necesita poner en marcha una estación de cambio de batería en cualquier punto en California, y listo. Pero en los foros de Tesla está corriendo un rumor preocupante que puede elevar esta cuestión a nivel de escándalo.
Por supuesto no hay confirmación oficial y tendremos que interpretar esto como lo que es, un rumor. Parece que el Tesla Model S no está preparado para el cambio de baterías. Según varios testimonios de propietarios, la unidad utilizada para la demostración estaba especialmente preparada para ello.
Los comentarios de algunos usuarios no ayuda tampoco, ya que en una visita al servicio técnico, Tesla ha necesitado 3 horas para retirar la batería. Ante la pregunta del propietario asegurando que la batería está preparada para ser cambiada en un minuto y medio, el técnico ha respondido con una risa.
Beneficios
Tesla ha confirmado esta semana que durante el segundo cuarto del 2013 ha cerrado el ejercicio con 15.9 millones de dólares de beneficio. Se trata de todo un espaldarazo a una gestión que hasta ahora sólo ha tenido buenas palabras por parte de inversores y expertos.
El problema de nuevo es que gran parte de estos beneficios se han logrado en base a un curioso sistema de créditos de emisiones, que muchos dicen se han creado para aumentar el número de coches eléctricos en las calles. Otros que se ha diseñado para reducir las emisiones y mejorar la eficiencia de los vehículos. Pero que todos coinciden en que llegará a su final a medio plazo cuando el número de compradores de créditos sea mucho menor que el de vendedores, y estos dejen de ser tan rentables como ahora.
Sin duda para Tesla la mejor forma de callar bocas y cerrar parte del escándalo que se avecina, es cumpliendo la promesa y poniendo en marcha las primeras estaciones de carga de baterías. Entonces sabremos si los Model S son realmente compatibles con esta tecnología, o esta ha sido anunciada como una vergonzosa fórmula de recaudación.
Vía | Doubtingisthinking