El nuevo Roadster será el coche halo de la marca Tesla cuando se lance al mercado, aunque de momento, ya llama mucho la atención, tanto por su diseño como por sus características técnicas. Ahora, parece que esto podría mejorar aún más gracias a la implementación de la tecnología de supercondensadores de Maxwell.
El Tesla Roadster está destinado a dejar en ridículo a cualquier coche de combustión interna, en palabras del propio Elon Musk, quien dice que viendo las características del Roadster, cualquier coche de combustión sufrirá una comparación injusta. Este superdeportivo eléctrico se presentó hace casi dos años y, en todo este tiempo, Tesla ha continuado con su desarrollo sin soltar demasiada prenda al respecto.
A principios de este año, Tesla se hacía con la compañía especialista en baterías de celda seca y supercondensadores Maxwell. Unas innovaciones en las que en Tesla están muy interesados y serían una combinación perfecta para el nuevo Roadster.
Mark Ellis, experto de Munro and Associates, ha comentado recientemente en una entrevista que la tecnología de supercondensadores de Maxwell tiene un potencial enorme en el sector de los coches eléctricos: «La tecnología de baterías de celda seca cambiará el sector si consiguen ponerla en un vehículo.» La tecnología de supercondensadores, además, podrá ayudar a mejorar la gestión y la eficiencia energética que realizan los coches eléctricos.
«Uno de los problemas con la batería es que, cuando pisamos el pedal del acelerador a fondo, estoy descargando muchísimo la batería. Después, cuando freno a fondo, estoy recuperando mucha energía gracias a la frenada regenerativa, pero las baterías no pueden recibir esta cantidad de energía lo suficientemente rápido. Las baterías sufren mucho cuando se pide mucha potencia, pero si tuviera supercondensadores, estos amortiguarían la descarga y actuarían de puente entre la batería para proporcionar la potencia que necesito y devolver la energía recuperada de forma rápida cuando se frena.»
De esta forma vemos como los supercondensadores actúan de colchón entre la batería y estos mismos. Los supercondensadores se cargan y suministran la energía a través de ellos, sin hacerlo directamente desde la batería, sufriendo esta menos a la larga.
Aunque por el momento no hay confirmación oficial por parte de Tesla de que se vayan a utilizar supercondensadores en el Roadster, cabría esperar su implementación para ayudar a la mejora de las características técnicas de un vehículo de esta potencia, permitiendo aceleraciones muy seguidas sin dañar la batería. La adquisición de Maxwell por parte de Tesla, es otra prueba de que esta tecnología interesa y tiene futuro, además de hacernos sospechar sobre su llegada al Roadster.
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