Mientras el mercado europeo de turismos sigue sin levantar cabeza en los últimos meses, con una caída del 10% respecto a julio del año pasado, los coches eléctricos siguen abriéndose paso y ganando terreno a los híbridos enchufables. De acuerdo a JATO Dynamics, en julio del año pasado se matricularon 966.453 coches en los 26 mercados de la Unión Europea, mientras que el pasado julio fueron solo 866.038. En lo que vamos de 2022, la caída interanual es del 13%.
La proporción de eléctricos puros entre las nuevas matriculaciones está en línea con los resultados a nivel mundial que os trajimos recientemente: 10% de coches eléctricos o 14% si contamos a los PHEV. En el caso de Europa se aprecia un fuerte retroceso de los híbridos enchufables, que caen un 22% en julio y hacen que el combinado de BEV y PHEV retroceda un 2%. Hablamos de 157.614 unidades enchufables, frente a 160.646 del año pasado. Al menos en cuota hacen un nuevo récord en julio, el 18%.
La lectura que se hace de estos resultados es clara, ya sea por problemas de producción (falta de oferta) o por los anuncios de que van a ir perdiendo ayudas a la compra para cuando puedan ser entregados (falta de demanda), los híbridos enchufables van perdiendo atractivo frente a eléctricos puros, aunque estos últimos sean más caros.
Los térmicos de gasolina y gasóleo han frenado su retroceso en su segmento de mercado, aunque han caído en volumen. De hecho, en julio de 2021 el 59% de los matriculados fueron gasolina -o híbrido de gasolina-, como el mes pasado, y el 20% diésel (22% el año pasado). De momento, parece que las motorizaciones convencionales aguantan, aunque puede ser un efecto pasajero. Eso sí, los diésel han perdido el 10% de cuota en dos años.
Las marcas europeas y americanas tienen bien posicionados sus híbridos enchufables entre los 10 más vendidos, destacando el buen papel del Kia Sportage, que va en cabeza y el año pasado no estaba. También destaca el porrazo del Ford Kuga, que ha perdido más de la mitad de su volumen en un año. En cuanto a los eléctricos, recordaros que no hay ningún Tesla porque las entregas se suelen concentrar los finales de trimestre.
Stellantis, Volkswagen, Hyundai y Renault copan el top 10 de ventas, y resulta muy significativo que el Dacia Spring Electric, fabricado en China, superó la 3.000 unidades en julio y cuadruplicó su volumen. Ojo al Cupra Born, muy cerca del modelo en el que se basa, Volkswagen ID.3, que a su vez ha caído un tercio. Las fábricas europeas siguen sin poder dar salida a toda la producción que les gustaría y sigue habiendo paradas por falta de chips u otros componentes.
De todas formas, conviene hacer una reflexión en torno a los datos de esta última tabla. La media de los 26 países de la Unión Europea es de una cuota del 10,4% de eléctricos puros, muy por encima del 2,8% de España, aunque el año pasado fue mucho peor, solo el 1,8%. Somos un país de tercera fila en ese sentido, cercanos a República Checa (2,3%), Polonia, Croacia (3,2%), Estonia (3,2%) o Italia (3,3%).
Que no nos sorprenda pues que la llegada de coches eléctricos sea prioritaria en Noruega (68,9%), Suecia (26,2%), Holanda (22,7%), Dinamarca (19,4%) o Alemania (13,9% y el más voluminoso en general). Allí es donde se concentra el despliegue de marcas chinas como NIO o XPeng, que de momento no van a ser una enorme amenaza, pero cosa distinta es hablar de BYD, habida cuenta de que es el fabricante que, a nivel mundial, más coches enchufables fabrica y vende.
¿Y qué más tienen en común esos países del norte europeo? Concentran una barbaridad de puntos de recarga en relación a resto de la Unión Europea (Noruega está en zona EFTA), una población con un elevado poder adquisitivo, y políticas públicas que benefician mucho a los coches eléctricos. De hecho, los alemanes hasta final de año están subvencionando indirectamente hasta las compras de los daneses.
Ya lo decía aquella famosa campaña publicitaria, Spain is different.
